
Alberto se empodera, Mauricio se borra
En apenas diez días de gestión, Alberto Fernández consiguió lo que pocos antecesores: una megaley de emergencias múltiples y la atribución de facultades que lo convierten en todopoderoso. Una suerte de absolutismo estatal con injerencia directa en el sector privado. La norma sancionada por diputados y senadores en solo 48 horas habilita al Presidente a eludir al Congreso, nada menos que para decidir en cuestiones económicas, financieras, fiscales, previsionales, administrativas, tarifarias, energéticas, sociales y sanitarias. Sí, nueve emergencias. Es cierto que, como sostiene el Gobierno, llegamos a este punto gracias a la muy mala gestión de Mauricio Macri, que agregó nafta a un fuego que ya se había encendido en el último mandato de Cristina Fernández de Kirchner, hoy flamante vice. Suc...